A veces nosotros mismos somos nuestros peores enemigos. Nuestras decisiones y sentimientos pueden traer repercusiones a nuestros familiares, amigos y sociedad en general.

Sucede que Andrew, un introvertido joven con una familia disfuncional (padre alcohólico y abusivo y madre enferma y en lecho de muerte) adquiere una cámara de video y empieza a capturar todo lo que puede en ella. Una noche de fiestas, él, su primo Matt y un amigo llamado Steve, descubren un agujero en la tierra; lo que encuentran dentro cambia totalmente sus vidas… y la de muchos más.

Chronicle tiene una trama sencilla aunque cargada de elementos sobrenaturales (algo obvio en la imagen). Apenas tiene unos 83 minutos de duración y está grabada muy al estilo «La Bruja de Blair» y «Cloverfield» , con un uso pesado de cámaras-dentro-de-la-película.

Entre los actores tenemos a Dane DeHann, Alex Russell y Michael B. Jordan, quienes interpretan a los protagonistas del film, tres jóvenes comunes con sus marcadas personalidades. Además, tenemos a Michael Kelley, Ashley Hinshaw y Anna Wood. 

Las actuaciones no son nada meritorias de alabanzas y celebraciones, pero hacen su trabajo. Las pistas musicales no son del todo malas y los efectos a veces flaquean y en otras ocasiones parecen muy buenas, un balance que no es necesario pero que no llega a ser molesto.

Creo que para tener un presupuesto de 12 millones de dólares, hicieron un buen trabajo en el manejo de los recursos y nos presentaron un producto que, al principio, voló (irónicamente) debajo del radar para luego postularse como una película que dio mucho de qué hablar.

Chronicle no es mala, en lo absoluto… es una película regular en la que se debe tener presente lo siguiente: No es una película de tres súper-héroes, es una película donde tres jóvenes logran obtener súper-poderes.

…y, por supuesto, esperen la segunda parte, porque eso va.