A pesar de estar ambientada en época de otoño─durante la última semana de octubre y, consecuentemente, Halloween, Cobweb se estrenó durante el mes de julio del 2023, justo cuando también se estrenan Barbie y Oppenheimer.

Si Cobweb fue un desastre taquillero (poco más de 7 millones a nivel mundial), cualquiera pensaría que se debió a su extraña posición y temporada en las carteleras de cine. Aunque eso influye, la verdad es que Cobweb es una película que no se destaca en su propio género y mucho menos saldría a flote entre los blockbusters ya mencionados.

Viniendo los productores de Barbarian e IT, Cobweb tiene un buen punto de partida. Personalmente, la trama no me atrajo mucho pero los nombres de algunos actores principales tienen su magnetismo.

El filme estuvo protagonizado por Antony Starr (mejor conocido por su rol como Homelander en The Boys) y Lizzy Caplan. Junto a ellos Woody Norman, Cleopatra Coleman y Luke Busey.

Peter es un niño de ocho años que se ve asediado todas las noches por un constante tap-tap dentro de las paredes de su habitación. Sonidos que sus padres mantienen son producto de su imaginación. Cada noche que pasa el miedo de Peter se intensifica hasta el punto de creer que sus padres están escondiendo algo.

¿Qué es peor que desconfiar de tus propios padres?

Premisa atractiva, actores conocidos, productores de películas exitosas dentro del género.
Aún así, la película no me gustó.

El arranque es lento y para nada interesante, la actuación no es mala pero el guión hace que uno cuestione lo que está viendo─principalmente después que se conoce el twist de la película que, por cierto, tampoco es innovador y nos deja con más preguntas que respuestas. El final es abrupto, muy abrupto, diría yo─lo que me hace pensar que el filme quizás tuvo problemas de edición.

La música es olvidable… bueno, creo que la película entera es olvidable. Es un poco penoso que los productores de Barbarian e IT tengan que manchar sus currículos con Cobweb.