The Blade Itself es una novela dentro del género de fantasía escrita por Joe Abercrombie y publicada en el 2006. Es el primer libro de la trilogía conocida como The First Law.
En esta primera entrega seguimos a un puñado de personajes; entre ellos Logen Ninefingers, un bárbaro que paso a paso, y por razones ajenas a él, se aleja de la región que llama hogar.
Jezal dan Luthar, un joven de la nobleza, egoísta e inmaduro, dado al juego y a la bebida pero cuya sangre y sueños de gloria lo atan a una guerra inminente.
También está Sand dan Glokta un inquisidor que odia todo y a todos; una vez guerrero envidiable, hoy en día lisiado y torturador en búsqueda de la verdad. Sigue un rastro de cadáveres hasta intentar dar con el mismo centro del gobierno. Corrupto o no.
Por último, Bayaz, que pudiera ser tanto un formidable mago como un fraude espectacular. Un hombre con una agenda oculta y que necesitará varias piezas para poder dar su próximo paso.
The Blade Itself es un libro excelente, aún más si se prefiere una trama que esté dictada por los personajes y no por la acción per se. La novela se desarrolla lentamente a través de varios puntos de vista, tanto de personajes principales como de algunos secundarios, pero nunca una cantidad tan elevada a-la-Game-of-Thrones.
Y hablando de Game of Thrones, no puedo dejar pasar por alto que algunas cositas me recordaron a la serie de A Song of Ice and Fire. Aunque creo sentirlo más como homenaje y no plagio: uno seres extraños -que abundan en el norte- puede que se encuentren en dirección al sur, donde reina la intriga política.
Autores más experimentados, tomando a Brandon Sanderson de ejemplo, tienen la habilidad y el talento de mantenerte adherido a libros extensos con un elenco reducido; The Way of Kings gira entorno a unos cuatro personajes. Joe Abercrombie, en su debut, logra absorber toda tu atención siguiendo también a cuatro personajes que se podrían considerar protagonistas. Ambos autores lo logran, pero de distintas maneras. En los libros de Sanderson hay más acción y muchos eventos acontecen uno detrás de otro. En The Blade Itself el autor nos prepara para lo que viene a continuación, es como un estudio de personaje y prólogo de la trilogía.
Cuando me acercaba a la recta final del libro pude notar que verdaderamente The Blade Itself es una introducción a los próximos libros y, aunque tiene méritos por sí mismo, es ésto lo que no me permite darle la máxima puntuación. Es un libro que, sin lugar a dudas, puede ser mejor disfrutado cuando se lee por segunda vez y ya se ha acabado de leer toda la trilogía.
Al hablar de Joe Abercrombie siempre se menciona la palabra grimdark. Grimdark no es más que un sub-género de la fantasía donde tenemos una historia cruda, sombría y oscura tanto en temática como en presentación. Esta novela, por sí sola, no me pareció tan grimdark, pero sé que también es algo en lo que uno debe alejarse y asumir perspectiva después de disfrutar la trilogía completa, porque me parece que The First Law es todo un arco y no tres historias con separación. Aún hay tiempo para yo estar equivocado.
The Blade Itself se publicó en el 2006, unos 14 años atrás. Quien gusta del género es muy probable que ya lo haya leído, dificultándome así la potestad de recomendarlo o no. En caso de que alguien no lo haya leído, solo diré que lo recomiendo pero solo bajo la condición de que en ese momento se quiera disfrutar de una lectura más pausada, donde los personajes -y no la trama- son los jinetes.
Espero leer el segundo libro -que se titula Before They Are Hanged– muy pronto.