Es muy difícil no promocionar una comedia nueva que tiene a Greg Daniels como creador, Steve Carell como protagonista y un capítulo escrito por Paul Lieberstein sin mencionar a la exitosa serie The Office.
No recuerdo la conexión entre las dos series en promos oficiales de Space Force, pero el público estaba especulando, por supuesto. Las expectativas estaban altas. Altísimas, diría yo.
Antes de Donald Trump ser presidente de los Estados Unidos las Fuerzas Armadas tenía cinco ramas de servicio: Army, Navy, Marine Corps, Air Force y Coast Guard. A finales del 2019, el congreso autorizó la creación del United States Space Force y se establece oficialmente el día 20 de diciembre. No es más que un rediseño del Air Force Space Command y su asignación como rama independiente dentro de las Fuerzas Armadas.
Space Force, la serie de Netflix estrenada en mayo 2020, busca ser una sátira de todo esto. En ella seguimos al General Mark Naird, encargado de liderar al grupo de personas que componen la fuerza. Un grupo cuya tarea inmediata es poner ‘botas sobre la luna’.
Criticada fuertemente desde su lanzamiento, Space Force resbala sobre el éxito de sus creadores. La grandeza de The Office parte de su simpleza: el estilo documental, el uso de una sola cámara, un elenco de caras desconocidas -pero de múltiples talentos si tomamos como ejemplo a Mindy Kaling, B.J. Novak y Paul Lieberstein- y varios factores más.
Space Force grita ‘dinero’ desde que arranca el piloto. Efectos especiales y un amplio elenco de estrellas conocidas nos invita a pensar que disfrutaremos de 10 episodios espectaculares.
Cuando empezaron a surgir las columnas y opiniones sobre la serie -la mayoría de ellas negativas-, traté de defenderla un poco. Por lo regular, dichas columnas son publicadas antes de un estreno, en este caso el de una serie, por lo que nosotros -la plebe- debemos esperar para construir nuestras propias opiniones.
Unos tres episodios vistos y empecé a entender las críticas. Creo que muchas de ellas son exageradas, pero hay detalles en los que estoy de acuerdo. Defendí la serie en las redes sociales diciendo que debíamos aprender a separar The Office de Space Force. Una vez logrado ésto, el disfrute de la última podría ser alcanzado. No sentía lo mismo después de siete episodios vistos y estaba casi al 100% de acuerdo con las críticas originales cuando terminé la serie completa.
Tanto potencial desperdiciado.
Space Force cuenta con un elenco formidable -al menos en papel-. Steve Carell, John Malkovich, Lisa Kudrow, Diana Silvers, Ben Schwartz, Tawny Newsome, Noah Emmerich, Jimmy O. Yang y el fallecido Fred Willard. Los roles principales están llevados a cabo con cierta aceptabilidad, pues en verdad el guión ofreció muy poco. Carell interpreta a Naird de manera extraña, con un tono de voz e inflexiones que nos hace pensar en que está encarnando a algún personaje en un stand-up comedy y que no pudo salir de él. Malkovich es uno de mis actores favoritos y creo que lo mejor de la serie, pero otra vez debo mencionar al guión como culpable de cualquiera de sus faltas.
A pesar de las malas críticas, Netflix ha lanzado la última carcajada. Space Force ha sido vista por miles y miles de usuarios, escalando al tope de sus listas. Ojos curiosos, fans de los actores o sus trabajos anteriores… Sea cual sea la razón creo que podemos esperar al menos otra temporada, especialmente si basan su éxito en números y no en críticas.
Se me hace muy difícil recomendar Space Force, aún separándose de The Office, sus fallas son muchas y, aunque me reí en diversas ocasiones, creo que hay mejores comedias, -aun teniendo más tiempo libre durante los últimos meses-. Si hay algo que he estado pensando hacer después de terminar esta serie es finalmente dar con Veep, una propuesta de HBO que se ha colado en la conversación cada vez que se publica un artículo sobre la serie de Netflix. Dicen que Veep sí sabe dar en el clavo en cuanto a la creación de una sátira política y la verdad es que siempre he sentido cierta intriga.
Como dato curioso, Netflix marcó como suyo el nombre de Space Force mucho antes de que la administración de Trump autorizara la creación del branch. En cuestiones de Copyright, Netflix se adueñó del título mientras que el gobierno imagino estará preparando un caso legal contra la compañía de streaming.