No es mucho lo que puedo decir sobre tan conocida película, estrenada por allá, en el 2001. Enemy at the Gates recibió buenas críticas y aún es recordada por muchos, incluyéndome.
Hace ya bastantes años que vi Enemy at the Gates por primera vez. Una noche reciente la encontré en el catálogo de Netflix y quise revivirla. Así lo hice. Ahora, creo una pequeña entrada para inmortalizarla en ésta bitácora.
La película fue dirigida y escrita por Jean-Jacques Annaud (quien se encargó también de «Seven Years in Tibet») y contó con actuaciones de Jude Law, Ed Harris, Rachel Weisz, Joseph Fiennes, Bob Hoskins y Ron Perlman.
Enemy at the Gates está ambientada en la Segunda Guerra Mundial, el campo de batalla es Stalingrad y quienes combaten son los rusos contra los alemanes.
Vassili Zaitsev (Jude Law) es un ruso con excelente manejo del rifle y, uno a uno, va acabando con la defensa alemana, hiriendo profundamente su ego y moral. Los alemanes no tienen de otra que buscar a alguien que pueda igualarlo -o mejorarlo-; y es cuando entra König (Ed Harris) en acción. La película se vuelve una batalla táctica, donde la inteligencia determinará quién es el gato y quién es el ratón.
Puedo decir que Enemy at the Gates ha sobrevivido al paso del tiempo. Sigue siendo una película muy buena, siempre que se vea como ficción.
Historiadores y estudiantes han criticado la veracidad de los hechos narrados aquí, pero yo solamente la vi -y la volví a ver- como una película más.
Las actuaciones son muy buenas, aunque actores como Jude Law y Rachel Weisz pasaron a hacer mejores cosas después de ésto. Joseph Fiennes me sorprendió mucho, me intriga el porqué no llegó más lejos en su carrera. Ed Harris y Bob Hoskins, por supuesto, añaden una buena colaboración a su amplio currículo, y no tengo ninguna queja de Ron Perlman; aceptable labor.
Como ya establecí, Enemy at the Gates sobrevivió al paso del tiempo. Quizás la vuelva a ver en 10-15 años más tarde, nadie sabe. Si aún no la han visto, puedo recomendarla abiertamente.