En la introducción de la nueva colección de relatos de Stephen King, el autor mismo escribe:
Easy reading is the product of hard writing.
Pues, si me llevo de ésta pequeña oración, concluyo -y quizás acertadamente- que escribir es un trabajo bastante difícil para el señor Dennis Lehane.
Mi idea era leer la serie de Patrick Kenzie y Angela Gennaro de una manera calmada y pausada, con tiempo y libros entre ella. Hasta ahora he logrado lo mismo que se hace con las palomitas de maíz en una sala de cine: devorarlas antes de que comience la película.
Eso es «easy reading», damas y caballeros.
Si el primer libro dejó marcados a nuestros protagonistas, éste lo multiplica.
En Darkness, Take My Hand Patrick y Angie acuerdan vigilar y proteger al hijo de una reconocida psiquiatra quien teme estar siendo asediada por la mafia irlandesa.
Cuando cuerpos mutilados empiezan a aparecer, todo indica que un asesino en serie anda suelto.
El sospechoso más probable tiene veinte años tras las rejas. Imposible estar cometiendo crímenes tras barras.
Patrick y Angela se verán mezclados en una persecución, tanto detrás del asesino como por sus vidas. Nadie estará a salvo y solo es cuestión de tiempo para que la masacre llegue a sus puertas…
Hace apenas unos días reseñé A Drink Before the War, éste lo supera con creces.
En A Drink Before the War, Lehane teje una trama que mezcla el poder político con las guerras entre gangas afroamericanas como una excusa para que Patrick medite y reflexione sobre su pasado, sus prejuicios presentes y su postura futura. Mientras que en Darkness, Take My Hand, el autor amenaza directamente a los protagonistas y los suelta a una búsqueda que puede resultar en fatalidades y daños emocionales (y físicos) permanentes.
Darkness, Take My Hand empieza con un prólogo desgarrador, Patrick narra cómo se siente después de los eventos que se leerá en el libro. Cicatrices, personajes que ya no están, nombres que desconoces y un desfile de eventos que tienen que ver -o no- con lo que se narrará. Un arranque que te pondrá al filo de la navaja, al margen de tu asiento, la espalda a la pared.
Está de más decir que Lehane ha creado a unos protagonistas multi-dimensionales, y hasta los personajes secundarios (Bubba, Phil, Devin, Oscar, Grace, Bolton y demás) resaltan sobre el papel y acaban siendo memorables de una forma u otra.
En lo personal, el único defecto del libro es que descubrí -como a la mitad- quien era el villano. Aún así, ésto no le quitó nada al producto final.
“We’re humans, so we’re messy”
Darkness, Take My Hand se merece sus cinco estrellas completitas en Goodreads, es algo que no tuve ni que detenerme a pensar.
El siguiente libro en la serie es Sacred. Lo tengo justo al lado y sí, ya he leído unas cuantas páginas. Easy reading, my friends. Easy and enjoyable reading. La colección de cuentos del tío Steve tendrá que esperar un rato más. 😛