Soy parte de la gran cantidad de personas que dicen que son muy pocas las películas de Leonardo DiCaprio que podrían considerarse como «malas«. Lo mismo pasa con el director Martin Scorsese.
Este dúo pone en sincronización sus grandes talentos para desarrollar lo que es «Gangs of New York», una película lanzada en el 2002 y que me tomó diez años en sentarme a verla; la misma cantidad de nominaciones que obtuvo para los Premios de la Academia (Oscars) en el año 2003.
Tengo que decirles que a pesar de tan gruesa cantidad de oportunidades, se fueron en blanco. Obtuvo nominaciones a mejor actor, mejor cinematografía, mejor vestuario, mejor dirección, mejor guión, mejor música, entre otros.
Como todos sabemos, los colores se hicieron para gustos variados, de igual forma sucede con el arte, la música y, como en este caso, las películas; para mencionar algunos enunciados.
La verdad que, siendo sincero, esperaba más de esta película. Creo que esperé demasiado para verla y eso restó el impacto que podría haber causado en mi, pero esa es mi conclusión definitiva. La película no es mala, pero de verdad esperaba más. Se extiende demasiado hasta el punto de aburrir y, honestamente, ninguno de los actores (salvo Daniel Day Lewis) me sorprendieron en lo absoluto.
Leonardo DiCaprio interpreta a Amsterdam Vallon un joven que fue testigo de cuando Bill ‘The Butcher’ asesina a su padre. Pasan los años y Vallon regresa a esa peligrosa parte de New York (ambientada en los años 1800) en búsqueda de venganza personal.
Apoyando a DiCaprio y a Daniel Day Lewis tenemos actores como Liam Neeson, John C. Reilly y Cámeron Díaz.
Reitero que no me gustó mucho aunque tuvo sus momentos, por ejemplo, la sangrienta batalla de los primeros minutos y las escenas finales que no detallaré por obvias razones.
Son muchas las películas de Martin Scorsese que no he visto, pero entre las que sí he podido ver, creo que esta es una de las más débiles.