Todo aquel que conoce -aunque sea un poco- el mundo de los cómics, sabe que es un ‘hobby’ bastante caro.
También cabe destacar que las compañías más conocidas tienen años y años creando y publicando historias, por lo que se complica un poco ‘caerle atrás‘ a tan largos ejemplares. Aunque, actualmente, los ‘reading orders‘ se consiguen con suma facilidad en la internet.
Por lo general, yo prefiero leer una novela gráfica que tenga un principio y un fin. Quizás un volumen que pueda tomar en mis manos, sabiendo que el final del libro poseé un desenlace.
Escuché de Saga la primera vez gracias a un compañero de trabajo que es fanático de Brian K. Vaughan («Y: The Last Man», «Ex Machina», «Runaways», «Pride of Baghdad»).
Vaughan, además de un amplio currículum en el mundo de las historietas, también ha participado en series de televisión, como «Lost» y «Under the Dome».
En Saga, Vaughan, además de ser el creador, es el encargado de escribir la historia mientras que Fiona Staples («Done to Death», «North 40», «Archie») la ilustra. La compañía que se encarga de su publicación y distribución se llama Image Comics («Outcast», «Revival»).
Vaughan se basó en sus experiencias tanto como niño e hijo y, ahora, como padre adulto. Menciona como inspiración a Star Wars, Game of Thrones, Romeo & Juliet y The Lord of the Rings.
Saga aún está en circulación, lleva a la fecha 32 publicaciones. La #33 estará disponible el 27 de enero del año en curso.
Como bien dice el título de esta entrada, he podido dar con el 1er volumen del cómic (el cual encierra las publicaciones del 1 al 6).
Considerada un historia para adultos y encerrando géneros como ciencia ficción, fantasía, aventura, acción, romance y drama, Saga nos cuenta una historia que, a primera impresión, puede parecer bastante utilizada. Conoceremos a una pareja de distintas razas y que luchan para bandos contrarios, éstos se enamoran y traen al mundo a una niña. A partir de ésto, el objetivo principal de Marko y Alana es sobrevivir a quienes les persiguen y mantener a su hija Hazel a salvo.
Junto a un colorido elenco que incluyen seres con cabezas en forma de televisor, un mono traicionero, un gato detector de mentiras, niños fantasmas, extraños cazarrecompensas y más, Saga promete páginas y páginas de puro entretenimiento.
El margen es pequeño, pero creo que Vaughan ha creado una historia totalmente disfrutable. La creatividad resalta de la pluma de Fiona Staples, admirable aún cuando muy poco sé del tema. Solo me bastan mis ojos. A veces eso es suficiente.
Lamentablemente, Saga no es perfecto. Tiene más pros que contras, sí. Pero no es perfecto. Ya dije que la historia puede parecer conocida, una pareja que no está supuesta a estar unida conciben una hija que puede ser la esperanza de un futuro… Seh, muy conocido.
Además, algunas cositas no serán del gusto de todo el mundo. Izabel (por ahora, uno de mis personajes favoritos) es una niña fantasma que sufrió una muerte horrible y, cada vez que aparece en páginas, hemos de recordarlo.
También hay una niña de seis años que se encuentra en el peor de los lugares, teniendo que hacer cosas inimaginables.
Realmente, cosas que no sentarán bien al estómago de algunos.
¿Pero los pros? Aparte de la creatividad que exhuman los creadores; la inteligencia en los diálogos, los momentos cómicos, los colores, hasta la colocación de las burbujas. Un pedazo de arte.
Si aún no han leído Saga, el volumen 1 está en especial en Amazon (unos 5-6 dólares).
Seguiré leyendo, a mi ritmo, el cómic. Pero no prometo colgar una entrada por cada volumen, pues sería redundar y, probablemente, ofrecer de gratis algunos spoilers no solicitados.