Es muy posible que esta entrada haya llegado un poco ‘tarde a la fiesta’, pero con el arranque de la segunda temporada de True Detective apenas estrenado dos noches atrás, creo oportuna la adición de estas palabras a mi blog.
Como ya muchos deben saber, True Detective es una serie de HBO presentada en forma de antología, muy a-la-American Horror Story, donde cada temporada abarcará una historia diferente, con un elenco distinto y nuevas locaciones.
Sin mucho preámbulo, la primera temporada narra la historia de dos detectives que son traídos a interrogación para hablar sobre un caso de hace 17 años. Cada uno es interrogado de manera separada y cada uno cuenta la versión de la historia como mejor recuerda.
La serie saltará entre los dos tiempos, 1995 y 2012.
Lo que comienza como una interrogación normal hace que ambos detectives recuerden cosas del pasado que -a lo mejor- habían decidido olvidar, heridas se vuelven a abrir y detalles saldrán a relucir… Quizás detalles que ayuden a resolver tan intrínseco caso… Casi dos décadas más tarde.
La primera temporada de True Detective mezcla géneros de crimen y misterio con horror ritualista, temas de existencialismo y algo de drama gótico.
La serie estuvo creada y fue escrita por Nic Pizzolatto («The Killing») y todos los episodios fueron dirigidos por Cary Joji Fukunaga («Sin Nombre», «Jane Eyre»).
Matthew McConaughey y Woody Harrelson dan vida a los dos detectives y Michelle Monoghan, Michael Potts, Tory Kittles, Michael Harney, Alexandria Daddario y Lili Simmons dan color al elenco.
True Detective necesitó de tan solo ocho episodios para contar su historia. Cada uno con un alrededor de 60 minutos. La serie se estrenó el 12 de enero del 2014 y el episodio final fue el 9 de marzo del mismo año.
True Detective no es una serie para todo el mundo, se necesitan 2 ó 3 episodios para empezar a quedar ‘enganchados’. El ritmo es un poco lento y la temática es bastante fuerte. Es comparable con la serie de Hannibal.
Los personajes son seres humanos con miles de problemas, bastante reales y palpables, por lo que algunos no caerán muy bien. La actuación estuvo formidable, desde los protagonistas hasta los roles más inferiores. Lo mejor que he visto de McConaughey y Harrelson.
El personaje de McConaughey es bastante complicado y su flujo de pensamientos y manera de expresarse podrá no sentar bien a muchos, aún así, el guión ayuda a los personajes a mantenerse en altura con diálogos sutiles (aún traten temáticas pesadas) y, con el suspenso escalonado, la serie promete mucho desde la primera escena.
Muchos consideran a True Detective como la serie del año, otros ya la catalogan como «la mejor serie». Yo no llegaría tan lejos.
Es cierto que los defectos son escasos pero, como dije anteriormente, no es una serie para todo el mundo. Lamentablemente, cuando ese es el caso, es difícil catalogar la calidad de una serie de televisión.
Y bien es cierto, True Detective ya tiene sus fanáticos y tiene elementos que la pueden convertir en una serie de culto. También tiene una fuerte cadena de televisión que la representa. Además, los detalles técnicos estuvieron excelentes y tanto el creador/guionista como el director supieron cargar con toda la serie y salir airosos. Aún así, prefiero dejar que cada uno que pudo disfrutar de ella tenga su propia impresión, su propia opinión y su propia conclusión.
A mi me gustó mucho, mas no la considero ‘una de mis series favoritas’, ‘una de las mejores series’, etc. La disfruté mucho y creo que no fui el único en ver esa escena final del cuarto episodio más de cinco veces (pista: larga escena en una sola toma).
Ahora, esperar hasta el próximo domingo, a ver que nos deparará el segundo episodio de la segunda temporada.